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Trabajar mucho no es sinónimo de trabajar bien. Descubre cómo aprovechar al máximo tus horas laborales con estos 10 consejos
1: Levántate temprano.
No pases de la cama al trabajo, tómate tu tiempo para despejarte y despertarte bien antes de comenzar con tus tareas, no empezarás bien el día de trabajo con los ojos medio cerrados.
2: Planifica tu jornada.
Saber las tareas que te esperan durante tu jornada laboral, te ayudará a priorizar y a organizar mejor tu tiempo.
3: Ataca primero las tareas más complejas.
Al iniciar la jornada, tus niveles de concentración son mejores y tienes la energía renovada, aprovecha estas horas para las tareas que requieren mayor concentración y esfuerzo.
4: Aprende a priorizar.
No dejes las tareas importantes para el final por hacer otras que no los tanto. Priorizar tareas es un paso fundamental para la buena gestión del tiempo.
5: Dedícate a atender un tema cada vez.
Centra tu atención en una única tarea, trabajar en varios temas a la vez, impedirá que te concentres al máximo en lo que estás haciendo. Termina una tarea antes de empezar con otra te ayudará a sentir que vas avanzando.
6: Descansos.
Tu mente y tu cuerpo necesitan pausas para recuperar energía. Si tu trabajo requiere de un esfuerzo físico, aprovecha estos descansos para relajar tu cuerpo y hacer algunos estiramientos. Si por el contrario tu puesto es sedentario, levántate, camina y estira tus músculos. Recuerda hacer pausas cada cierto tiempo e hidratarte.
7: Ordena tu lugar de trabajo.
Ya sea una mesa, una caja de herramientas, un taller, una tienda, el escritorio de tu ordenador o un almacén, mantener el orden te ayudará a desenvolverte mejor en tu entrono laboral, es imposible ser eficiente y mantener la concentración si tu entorno de trabajo está desordenado.
8: Fuera distracciones.
El teléfono, las redes sociales, los juegos o estar pendiente de cosas ajenas al trabajo durante tu jornada, harán que pierdas la noción del tiempo y la concentración. Intenta evitarlo.
9: Divide y vencerás.
Divide las tareas en actividades más pequeñas, ponte pequeños objetivos que ir superando, disminuirá el estrés y alcanzarás tus metas más rápido.
10: Delega responsabilidades.
Delega tareas y céntrate en los proyectos en los que puedes aportar un valor diferencial y evita la sobrecarga de trabajo. Pide ayuda si la necesitas.
Esperamos que estos consejos te ayuden a ser una persona más productiva y que puedas así, disfrutar más de tu trabajo.